Como ya vimos, el estudio de las ciencias es algo elemental para los niños ya que, gracias a ellas, podrán comprender el mundo que les rodea y tomarán mejores decisiones donde hagan uso de los conocimientos que han ido forjando. 

En este apartado, estaremos hablando de las ciencias naturales en el preescolar, por lo que los estándares que pueden incluirse en el jardín de niños son:

-Conocimiento y comprensión de que la Tierra está llena de una variedad de organismos.

-Conocimiento y comprensión de que los organismos sólo pueden sobrevivir en ambientes que satisfacen sus necesidades básicas.

A continuación te presento algunas actividades que se pueden llevar a cabo que fomentan esta área.

El estudio de las ciencias naturales comprende todos aquellos cuestionamientos que introducen a los niños a los conceptos clave de que, en la Tierra, hay una gran variedad de organismos, y cada uno de ellos tiene sus propias necesidades y diferentes ciclos de vida. 

Para que los niños comiencen a tener este tipos de acercamientos con diferentes organismos, se pueden organizar excursiones alrededor de la escuela para  identificar todos los seres que viven allí.  De la misma forma, se pueden hacer cuestionamientos a los niños sobre cuántas plantas diferentes crecen en el patio, pueden contarlas y clasificarlas por tipos, cuántas de ellas se encontraron con mayor frecuencia, etc.

Otro tipo de actividad que se puede implementar, es la creación de terrarios. Los niños pueden conseguir tarros de plástico transparentes en cafeterías o restaurantes. Una vez tengan sus recipientes los llenarán con grava en el fondo, agregarán una pieza o dos de carbón para prevenir la putrefacción y el resto se cubrirá con tierra para sembrar. 

En este terrario, los niños podrán elegir dos pequeñas plantas verdes, dos piezas de musgo, dos piedras y dos helechos de entre una variedad de plantas. Conforme las plantas crecen, los niños podrán ir midiendo cuál creció más, cuál floreció primero, cuál tuvo primero retoños, cuál permaneció igual, etc.

 Los pequeños pueden buscar insectos en el patio, en sus casas o en la comunidad -siempre hay que verificar que no presenten ningún riesgo para los niños como escorpiones, viudas negras u otros insectos venenosos-. Se excavará un pequeño cuadrado de tierra en el patio o en un recipiente con tierra de su propio patio, los niños verterán una pequeña cantidad de la muestra de tierra en una hoja y se les preguntará qué pueden observar, después se calentará la tierra colocando una luz sobre ella y también se preguntará qué es lo que pasa o qué hacen los insectos. El calor de la luz hará que los insectos de la tierra se desplacen a un lugar más fresco. 

Finalmente, cuidar de los seres vivos es una forma en la que los pequeños pueden obtener el concepto de que cada organismo tiene su propio ambiente en el que se desarrolla. Es importante recordar que, antes de introducir seres vivos en el aula, los maestros y los niños deben comprometerse a proporcionar el ambiente óptimo a cualquier animal que decidan tener dentro del salón de clases. 

Referencias: 

Seefeldt, C. & Wasik, B. (sf) Preescolar: Los pequeños van a la escuela. Pp 284.287